Divino es el momento que uno crea, tan divino es el momento que uno crea y da, que el todo lo aprecia con grata estima para vivirlo, colorearlo y recrearlo a uno de vuelta con su máximo esplendor para su óptimo mérito y experiencia. He asà como todo lo dado a cambio con mayor fuerza regresa, pues el sentimiento cultivado permite crecer y florecer mayores frutos de vida, que nutran en mayor medida a la sociedad universal del mañana.
Procreación satisfactoria de un nuevo vivir, un nuevo sentir en bendición de comunidad y vitalidad para convivir en su supremo encanto la gloria de una gran enriquecedora y armoniosa obra.
Sea aquà otorgado el elixir del supremo ideal, condecorado, bien dirigido y surtido esplendor de disfrute, celebración y baile de todos nuestros servires. Que todo renacer sea mágica, mÃstica o divertidamente vivido a la percepción de su renacentista, bien por fantástica reencarnación o épico reinicio del glorioso juego de la vida.
Sea aquà otorgado el elixir del supremo ideal, condecorado, bien dirigido y surtido esplendor de disfrute, celebración y baile de todos nuestros servires. Que todo renacer sea mágica, mÃstica o divertidamente vivido a la percepción de su renacentista, bien por fantástica reencarnación o épico reinicio del glorioso juego de la vida.
Que los caminos marchados y proseguidos enaltezcan vuestras esperanzas, vibras y fé en la recompensa de grandes acciones. Asà como la travesÃa de un capitán que surca los mares dirige a su tripulación hacia el puerto o costa predestinados, o un lÃder muestra a su comunidad el camino de la grandeza alentándolos a persistir en sus avances, o una pastora protege, nutre y cuida de su rebaño con osadÃa, que sus vivencias sean de inmensa dicha. Sea nuestra inminente disciplina en el progreso por un mejor futuro común y para las próximas generaciones, la fuente de motivación y energÃa reforzada para la evolución hacia un mundo de mayores logros, proezas y bendiciones.